Malvinas. Una de las causas más nobles del pueblo argentino

Malvinas. Una de las causas más nobles del pueblo argentino

El trabajo realiza un recorrido histórico-político sobre la Causa Malvinas, a través de los 189 años de duración que lleva este conflicto con el Estado de Gran Bretaña.

| Por María Eugenia Duré |

Para las argentinas y los argentinos la Causa Malvinas atraviesa nuestra historia en un sentimiento malvinero común y colectivo por el resto de nuestros días. Por eso, para adentrarnos en nuestra historia, podemos decir que hace 189 años, un 3 de enero de 1833, mediante el uso de la fuerza, barcos de la Marina Real Británica invadieron Puerto Soledad, exigiendo la rendición y entrega de los territorios isleños de manera unilateral y desconociendo el derecho internacional y el ejercicio efectivo y legítimo de la soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y los espacios marítimos e insulares correspondientes.

Esto llevó a que nuestro país levante la bandera ya histórica de soberanía en un reclamo sostenido, ininterrumpido e inclaudicable, que constituyó a la Cuestión Malvinas como política de Estado, logrando así que la Causa Malvinas se convierta en una de las causas más nobles de nuestra identidad nacional, a la vez como parte de una identidad latinoamericana y de nuestro sur global.

Malvinas como una causa integral

Si realizamos un recorrido histórico político, podemos considerar desde nuestro punto de vista que con la primera presidencia de Juan Domingo Perón toma relevancia la “Cuestión Malvinas” de forma diplomática, y deja de considerarse como un hecho aislado para ser asumido como parte de un mismo proyecto de unidad continental que el mismo Perón denominó “Asunto Magno de la República Argentina”, sumido en esa visión integral que ejecutó como parte de la construcción de una soberanía territorial y marítima de un país bicontinental.

Es en este marco que su gobierno llevó a cabo acciones coordinadas en diversas dimensiones y escalas, que tuvieron por objetivo aumentar la presencia efectiva de nuestro país en la Antártida, haciendo valer nuestros derechos nacionales. Al tiempo implementó una política cultural que promocionó la conciencia popular antártica y bicontinental por la defensa soberana de las Islas en toda América latina.

Sin dudas, si tomamos en cuenta el accionar del entonces presidente Juan Domingo Perón, podemos decir que fueron los gobiernos enmarcados en el peronismo los que consideraron llevar la “Cuestión Malvinas” a cada foro internacional de manera diplomática, logrando el acompañamiento a nuestro reclamo legítimo de soberanía por parte de países que no dudaron en sostener que las Malvinas son argentinas, desarrollando así, a lo largo y ancho de nuestro territorio y de la región latinoamericana, el sentimiento que nos une en lo que denominamos la “Causa Malvinas”.

En este sentido, vale aclarar la diferenciación entre Causa y Cuestión Malvinas, que resulta de distinguir, por un lado, el trabajo realizado a nivel internacional en los ámbitos bilaterales y multilaterales que la entienden como Cuestión, y la Causa que responde al sentimiento que las argentinas y los argentinos llevamos como emblema en pos de la recuperación del ejercicio efectivo de soberanía sobre nuestras Islas Malvinas, sabiendo en lo más profundo que más temprano que tarde nuestra bandera volverá a flamear en nuestras islas.

A saber, el término “Cuestión de las Islas Malvinas” fue empleado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en la Resolución 2065 de la Asamblea General de Naciones Unidas, que reconoce la existencia de una disputa de soberanía entre la República Argentina y el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, bajo la cual insta a ambos gobiernos a entablar negociaciones para encontrar una solución pacífica y definitiva a la controversia, de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas, teniendo en cuenta los intereses de las y los habitantes de las islas. Siendo esta la herramienta fundamental con la que cuenta la Argentina para llevar a cabo el reclamo ante la comunidad internacional que, hasta el día de hoy a pesar de la disposición y voluntad de nuestro país al diálogo para la solución pacífica en consonancia con los principios de respeto al derecho internacional, el Reino Unido se niega a cumplir.

Sin embargo, como argentinos y argentinas consideramos que hablar de la Causa Malvinas nos posiciona en el sentimiento más noble del pueblo argentino; sentimiento que nos hermana para recuperar, a través del diálogo y la paz, nuestro territorio usurpado ilegítimamente. Es la identidad malvinera que tiene presente lo colectivo, en camino hacia una misma causa que nos une.

Los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández y la reconstrucción de Malvinas como política de Estado

En el período 2003-2015, la Causa y la Cuestión Malvinas retoman el protagonismo histórico de levantar la bandera de soberanía de los gobiernos de Juan Domingo Perón, en contraste con las políticas de desmalvinización y entrega de soberanía de los gobiernos neoliberales.

Sabemos que la “desmalvinización” tuvo un objetivo claro: olvidar, invisibilizar y entregar aquel rol heroico que tuvieron los y las jóvenes que, a pesar de ser parte de una injusta y unilateral decisión de un gobierno de facto, fueron a dar su vida por nuestra tierra, nuestra Patria y nuestra soberanía. Los gobiernos democráticos, en su mayoría hasta el 2003, no solo prefirieron olvidar, sino que escondieron a nuestras veteranas, veteranos y caídos, privándolos del reconocimiento como héroes y heroínas de todo el pueblo argentino.

Esta situación finalmente se revirtió a partir de la asunción del ex presidente Néstor Kirchner, el 25 de mayo de 2003, quien expresó en su discurso inaugural: “Venimos desde el sur de la Patria, de la tierra de la cultura malvinera y de los hielos continentales y sostendremos inclaudicablemente nuestro reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas”, marcando lo que sería el inicio de una década de agenda de Estado malvinera que incluyó la difusión y educación, reivindicando y honrando a los veteranos, las veteranas y caídos.

En la misma consonancia, Cristina Fernández de Kirchner, en su discurso de asunción el 10 de diciembre del año 2007, manifestó: “Quiero también reafirmar una vez más nuestro reclamo irrenunciable e indeclinable a la soberanía sobre las Islas Malvinas, y llamamos al país ocupante, que luce como adelantado y respetuoso en todos los foros internacionales, a reconocer que existe una situación de neocolonialismo, por lo que es preciso cumplir con todos los mandatos de las Naciones Unidas”.

No obstante, estas acciones y reivindicaciones se vieron en claro retroceso durante el gobierno neoliberal que transitó su mandato en el período 2015-2019, caracterizado nuevamente por la desmalvinización, la entrega de soberanía, la utilización de la soberanía como moneda de cambio y acuerdos que permitieron a la potencia usurpadora avanzar sobre los recursos naturales de nuestro territorio nacional, quitándole todo el sentimiento nacional a la causa más noble de todo un pueblo nacional.

No hay más lugar para el colonialismo. El rol de Congreso de la Nación

Después de cuatro años de retrocesos a nivel nacional e internacional, desde diciembre de 2019, el gobierno nacional retomó la Causa Malvinas como política de Estado en nuestro país.

El presidente Alberto Fernández expresó en su primer discurso de apertura del 138° período de sesiones ordinarias del Congreso de la Nación: “Nuestro hogar común tiene también una herida sangrando en lo más profundo de nuestro sentimiento soberano: la usurpación de Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur”.

En ese contexto anunció el envío al Congreso de la Nación de un paquete de “Leyes Malvinas”, cuyo objetivo fue fortalecer la Causa Malvinas como una política de Estado que trascienda a los gobiernos, cualquiera fuese su origen partidario; siguen siendo los gobiernos peronistas los que reivindican nuestros derechos soberanos.

Los proyectos de ley enviados al Congreso Nacional, y aprobados de forma unánime, apuntaron a tres ejes fundamentales: 1) La demarcación del límite exterior de la plataforma, más allá de las 200 millas, como resultado de una política de Estado que llevó adelante la Comisión Nacional del Límite Exterior de la Plataforma Continental desde 1997; 2) Actualización de las sanciones y multas a quienes ejerzan la pesca ilegal en aguas argentinas; 3) La creación del Consejo Nacional de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y espacios marítimos correspondientes, integrado por distintas fuerzas políticas con representación parlamentaria, notables académicos, académicas, juristas, representantes de excombatientes, funcionarios y funcionarias de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur (AIAS).

Es así que con la aprobación de las iniciativas se avanzó en construir una agenda común, consensuada e interdisciplinaria, que permite fortalecer el reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas. El Consejo Nacional de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Georgias del Sur, Sandwich del Sur y espacios marítimos correspondientes es un espacio plural que permite el intercambio y trabajo entre diferentes sectores, en pos de construir consensos que unifiquen nuestra posición frente al reclamo de soberanía.
Asimismo, se abordaron otras iniciativas en el ámbito del Poder Legislativo nacional, entre las que se destaca la propuesta de capacitar de forma transversal, respecto de la Cuestión Malvinas, a todas las personas que se desempeñen en los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial de la Nación; con el objetivo de profundizar la transmisión de conocimientos respecto de los argumentos históricos, geográficos, ambientales, económicos, políticos y culturales, que esgrime nuestro país en relación con la Cuestión Malvinas, así como también la información relativa a la normativa nacional e internacional vigente, que cuenta con media sanción del Honorable Senado de la Nación.

La capacitación siempre resulta un instrumento positivo para la formación e información de los distintos aspectos que consideramos fundamentales para el desarrollo de nuestro país. Este proyecto busca la concientización de la Causa Malvinas, lo cual consideramos un pilar fundamental para nuestra patria, a lo largo y ancho de nuestro país.

Tierra del Fuego, la provincia de Malvinas

Desde la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, más allá de los procesos históricos y políticos vividos, desde la usurpación británica, hubo un pueblo que mantuvo viva la Causa Malvinas, convirtiéndose en uno de los signos identitarios del ser fueguino y fueguina.

La ciudad de Ushuaia no solo ostenta el título de ser la ciudad más austral del mundo, sino que también a partir de 1990, bajo la ley nacional 23.775 de provincialización, tiene el orgullo de ser también la capital de nuestras Islas Malvinas.

Los numerosos símbolos alusivos a las Islas que recorren la provincia y las actividades que se realizan dan cuenta de un pueblo atravesado en su totalidad por uno de los hechos más tristes de nuestra historia, como el conflicto del Atlántico Sur en 1982.

A pesar de que en el año 1984 nuestro país se encontraba en un proceso de “desmalvinización”, el 1º de abril de ese año se realizó por primera vez una reunión de veteranos de la Guerra de Malvinas en la costa de la ciudad de Río Grande, Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur (AIAS), cubierta por las aguas del Mar Argentino, con el objetivo de conmemorar la memoria de la Gesta de Malvinas, en memoria a los caídos y resignificando el reclamo soberano por las Islas y sus espacios marítimos e insulares correspondientes.

Este acto se convirtió en un hito fundamental que llevó a que, a partir de 1995 y sin interrupción, una semana antes del 1º de abril, los veteranos alzan la “Carpa de la dignidad” frente al Monumento a los Héroes de Malvinas, en la misma ciudad de aquella reunión de 1984, realizando actividades de concientización y visibilización acerca del reclamo de soberanía de nuestras Islas.

A partir de 2013, el Congreso de la Nación declaró mediante la ley 26.846 a la ciudad de Río Grande como la “Capital Nacional de la Vigilia por la Gloriosa Gesta de Malvinas”, que lleva a que durante la noche del 1º de abril, en presencia de la multitud, con el acompañamiento de otros veteranos de guerra, vecinos y vecinas de la ciudad, de la región y el país, funcionarios públicos y referentes que trabajan por la Causa Malvinas a nivel nacional e internacional se congregan en un multitudinario encuentro en el Monumento Central a los Caídos, que está resguardado por banderas argentinas que recuerdan a nuestros caídos, mirando hacia nuestras Malvinas y contemplados por el fogón que nuestros veteranos se encargan de mantener encendido hace 27 años, desde esa primera vigilia.

La Vigilia es parte de cada fueguino y fueguina y es el lugar en donde se reviven los acontecimientos vividos por los habitantes de la provincia, siendo una herida en lo profundo de nuestro sentimiento soberano y teniendo como principal objetivo el reconocimiento de “héroes y heroínas” que lucharon por nuestra patria.

Es en nuestra provincia donde toma relevancia la importancia de profundizar la Causa Malvinas como política de Estado y fortalecer la construcción de la “Cultura Malvinense” en las nuevas generaciones, con el anhelo de que sea replicado en cada rincón de nuestro país.

Las juventudes como prioridades de nuestra causa

Son las y los jóvenes quienes seguirán manteniendo vivo nuestro reclamo de soberanía sobre las Islas y es en este sentido que el mayor compromiso que tenemos es poder fortalecer la Causa de manera integral, con el propósito de llegar a esas juventudes, todavía no interpeladas, desde políticas públicas que nos permitan desarrollar instancias de sensibilización y capacitación con un lenguaje más de pertenencia.

Son las nuevas generaciones los principales protagonistas para el sostenimiento de nuestra identidad, depositar la posta en ellos y ellas va a garantizar que la Causa continúe vigente.

Las Malvinas serán argentinas, por el diálogo, por la paz y con el convencimiento de que la recuperación de la soberanía de las Islas Malvinas no la haremos de rodillas, ni renunciando a nuestra moral de sentimiento malvinero. Será con un profundo amor por nuestro suelo argentino. Defendiendo siempre con dignidad los valores de nuestros pueblos, nuestra tierra y en honor a la memoria de veteranos, veteranas y nuestros caídos por la patria.

Autorxs


María Eugenia Duré:

Senadora Nacional del Frente de Todos por la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. Autora del proyecto de ley de Capacitación en la Cuestión de las Islas Malvinas, para la administración pública nacional. Fue concejala de la ciudad de Río Grande durante el período 2015-2019 y directora de Radio Nacional-Río Grande LRA 24.