| Por Juan Manuel Valdés | La pandemia y la necesidad de distanciamiento social pusieron en jaque la noción de la densidad como cualidad positiva de la urbanidad. Cabe la pregunta de si no existe un exceso de densidad, una saturación. Ante las enormes desigualdades latentes ahora expuestas, el interrogante que plantea este artículo es si la densidad es necesaria, pero no suficiente, poniendo el acento en la ciudad de Buenos Aires y el área urbana que la rodea.